viernes, 22 de febrero de 2013

Día 22 - Un Mutante

No teniendo mucho tiempo para pensar en la asignación, pero contando con curiosos objetos en la casa, me tropecé con todo un pequeño mutante al cual decidí aplicarle la misma "medida disciplinaria" (revelado) del reloj de arena de ayer, habiendo quedado técnicamente satisfecha con el acabado de esa asignación. Este bichito es una reliquia que conservo de mi mamá y recuerdo que de pequeña me entretenía mucho desarmarlo y armarlo. Es un hombre-huevito. Sí, con lo feíto y doble sentido que pueda sonar. Es un personaje inglés, creo que la Wikipedia nos puede resolver más al respecto (http://es.wikipedia.org/wiki/Humpty_Dumpty). Total que, para mi, el bichito es el propio mutante, un hombrecito de corta estatura atrapado en la silueta de un huevito. O la cáscara de un huevito. Como quieran interpretarlo! Es simpático el objeto este y me trae recuerdos por montón.


Día 21 - Un Segundo

Hay días en los cuales, en un segundo, se altera lo que habías planificado y hay que empezar a correr. Literalmente. Te levantaste con la espectativa de algo y, en un segundo, esa espectativa se esfumó. Tenías las cosas calculadas y, en un segundo, saltó una alarma en el cerebro que con voz de GPS te indica "Recálculo"... por aquí no es la cosa. Un segundo es una medida de tiempo súmamente breve, pero muy significativa. Así interpreté la asignación. Como una fracción de tiempo. Eso fue lo que quise capturar. Aunque de una manera más sutil de como transcurrieron las cosas en este día. Lo que me encantó de esta asignación fue haber podido drenar a través de una imagen (mi favorita hasta el día de hoy) mis pensamientos en torno al "tiempo" y, además, internalizar una frase que debo tener presente en estos momentos: es sólo cuestión de tiempo.


Día 20 - Un Héroe ¿Nacional o Local?

Siguiendo en la onda de los titubeos, no soy capaz de recordar si la asignación es sobre un héroe nacional o local. En una de divagancias, me pongo a pensar, por supuesto, en nuestros próceres, en los próceres de otras naciones, en admirados locales que pasan a ser admirados internacionales... en el cacareado, mediático, altamente cubierto e incomprendido caso del "Héroe" Oscar Pistorius, que se me aparece hasta en el cintillo del Gmail. En este punto, divago acerca del concepto de héroe. Porque quien es héroe para mi, puede no serlo para tí. Porque héroe puede ser un veterano de guerra, o el músico que llega más allá con su obra. O héroe puede ser, simplemente, aquella persona que hizo de un oficio un arte, que logró méritos y reconocimientos por ello y que trascendió en el tiempo para estar presente en la actualidad.

Pese a que el titubeo persiste hasta la hora de elegir al objeto central de mi foto, después de divagar y divagar, retorno al tema de "la caña", que tantas veces aparece como salvavidas, y plasmo como mi "héroe" al señor que a continuación presento...





No será prócer, pero en vida supo representar muy bien el nombre de nuestro país.

Día 19 - Un Titubeo

La palabra, solita, da risa. Es una de esas palabras del rico idioma español que no se pueden tomar en serio. Un verbo que denota indecisión, manguareo entre una cosa u otra. Soy capaz de afirmar que en la actualidad muchos vivimos en un titubeo constante, desde decisiones trascendentales para nuestras vidas, como aquellas que tienen que ver con la familia, el trabajo, incluso la ciudad o el país donde se vive; hasta decisiones sencillas, cotidianas, como romper o no romper la dieta y, si se va a romper, ¿con qué? ¿con un helado? ¿Con un paquete de galletitas? ¿Con chocolate blanco o para taza?... Grandes o pequeños titubeos. Aquí, titubeando entre fotografiar un titubeo trascendente o cotidiano, me quedé con el cotidiano:


lunes, 18 de febrero de 2013

Día 18 - Una Medida Disciplinaria

En estos últimos días, la palabra "medidas" parece perseguirnos. De igual forma otra palabra, muchísimo más desagradable, persigue en mayor o menor medida a muchos venezolanos: Violencia. Hay un importante sector que, aunque no es contabilizado en estadísticas, sufre de las consecuencias de esa violencia, a diario. Esa violencia puede ser psicológica o física, o una terrible mezcla de ambas. Y muchas veces puede ser inflingida bajo la fachada de correctivo... una agresión con máscara de medida disciplinaria que suele dejar profundas heridas, tal vez físicas, pero aún peor, psicológicas. Quizás puede generar la necesidad de drenar esa violencia con otros dentro de un entorno, o crear un concepto, por supuesto falso, de la necesidad de emplear acciones violentas a manera de correctivos.

La asignación del día representa una falsa medida disciplinaria y la sombra de esa violencia, que quizás sea el verdadero problema a corregir.


Día 17 - Un Quórum

Malvada foto tomada a las diez y pico de la noche, que no me gusta pero ni un poqueeeeto... (el tema, a su vez, me pareció tan de reunión laboral o de reunión de junta de condominio, que no encontré mus@ ;( ) (excusas, excusas, no hay que dejar la tarea para última hora).


Y es que este domingo fue una mezcla de viernes con sábado, estupenda para el ánimo pero dramática para el proceso creativo de quien no está acostumbrado a estos trotes.

Día 16 - Un Cambio Climático

Siendo 100% honesta, a esta idea no le di taannnnta vuelta como le he dado a otras. Tampoco me fui a analizar la situación actual con el cambio climático a nivel mundial, aunque es un tema que preocupa constantemente mi cabeza... salvo en el mes de febrero, en donde por segundo año consecutivo el querido staff de Roberto Mata es más importante que el cambio climático, la cena, el recibo de la luz, el agua que va y viene o cualquier otro asunto. Concluyo que, como al trago fantasma en el espejo de la asignación de ayer le hacía falta un hielito, ese va a ser el objeto de la foto de hoy. Es así como nos acercamos a un hielito, de manera tal que se distinga su no tan lento paso del estado sólido al líquido. No es nada lento porque ya está haciendo mucho más calor que en los últimos días. El hielito se derrite tan rápido como para hacerme perder la paciencia, pues le da por desplazarse como loco sobre la superficie, lo cual me hace clamar por una cámara con mayor velocidad de obturación! Aún así, me agrada el resultado final del experimento "Iceberg" en un cuadro de 1x1.